viernes, 28 de marzo de 2014

MUJERES MISÓGINAS (LA MEJOR ARMA DEL PATRIARCADO)

Me pregunto qué mueve a una psicóloga a denostar a la mujer maltratada y a difundir noticias de hombres maltratados aun cuando son una ínfima minoría frente a las víctimas de la lacra machista que sufren y han sufrido muchas mujeres de este país. Y en imparable aumento el número de ellas que ya no puede contarlo.

 

Notorio es el recrudecimiento del machismo, con una virulencia creciente que asusta. A nadie se le ha escapado la alarmante noticia del reciente asesinato de 5 mujeres en 48 horas a causa de la violencia machista. Hoy mismo otra mujer asesinada que eleva el número de víctimas a las que sus parejas o exparejas han arrebatado la vida a 30. Ya van 30 mujeres en 2014 con la de año que nos queda por delante. Insoportable. El machismo más retrógrado en pleno apogeo.

Pero, ¿qué lleva a una mujer a tratar de ocultar esta realidad para manipular a la opinión pública?

 

Esta clase de mujeres, lo que demuestran con sus actitudes es que son ellas mismas las que necesitarían ser objeto de terapia psicológica. Abducidas, resentidas, manipuladas......El caso es que esa animadversión hacia congéneres que están siendo masacradas por culpa del machismo, merece como poco la inhabilitación, ya que una ideología  tan extrema en contra de un determinado colectivo, inevitablemente va a impedir el grado mínimo de objetividad que debería exigírseles en el desempeño de su labor profesional.

 

Entre ellas está, por ejemplo, cierta psicóloga clínica que ejerce en Hospital Ciudad de Jaén...entre tantas otras. Desgraciadamente no es la única que ayuda a colectivos liderados por maltratadores y que entorpece la lucha contra la violencia machista, problema cada vez más grave en este país.

 

Es lamentable ser víctima del machismo - con el sufrimiento que conlleva – y al mismo tiempo tener que luchar contra congéneres que van a tratar de arruinar tu vida y la de tus hijos e hijas.

 

Mucho cuidado con ellas.

viernes, 21 de marzo de 2014

Repunte de la violencia machista: cinco muertas en 48 horas


En los últimos dos días, cinco mujeres han sido halladas sin vida en distintos puntos del país, presuntamente muertas a manos de sus parejas o exparejas. Este miércoles se han conocido las dos últimas víctimas de violencia machista, encontradas el lunes y el martes: una en Melilla y otra en Madrid. Hace dos semanas murieron cuatro mujeres en dos días solo en Andalucía. A primera hora, antes de que trascendiera la noticia de las dos últimas fallecidas, la vicesecretaria general del PSOE, Elena Valenciano, ha calificado la situación de "emergencia nacional" y la secretaria de Estado de Servicios Sociales e Igualdad, Susana Camarero, ha afirmado que los partidos se sentarán a dialogar sobre la situación.

En lo que va de año, han muerto 18 mujeres por violencia de género, según cálculos de este periódico. Una portavoz del Observatorio de la Violencia de Género explica: "Según datos del Gobierno, oficialmente figuran 15 víctimas en 2014. Hay otras tres en investigación (la madre y la hija muertas en Cádiz a principios de marzo, y la víctima de febrero de Fuenlabrada), y otros tres más pendientes de contabilización (los tres últimos casos conocidos: la víctima de Gelida, la de Melilla y la de Madrid)".

Melilla. Una mujer de 64 años y su pareja de 66 han sido hallados sin vida durante la noche de este martes en una casa de la Barriada de San Francisco de Asís, según EP. Ella fue acuchillada encima de la cama, posiblemente "degollada" según informaron fuentes policiales a la agencia, y él estaba ahorcado en el patio de la vivienda. Los agentes creen que todo apunta a un caso de violencia machista. El presunto agresor era un militar retirado. Una vecina encontró los cadáveres. Según las primeras investigaciones "no existía denuncia previa por maltrato".

Madrid. Este miércoles la policía ha anunciado que está investigando el homicidio de una mujer de 60 años que apareció sin vida este lunes en su casa, en el barrio de San Blas de la capital. María del Pilar S. R. fue hallada por su hijastra y una vecina, que entraron en el domicilio con una llave. La mujer estaba en el cuarto de baño, con un golpe en la base del cráneo, que según la autopsia apunta a un presunto homicidio. La investigación está abierta, y se desconoce si existían denuncias y cuál era su situación familiar. El caso está aún a falta de confirmación oficial sobre si se trata de violencia de género.

El pasado lunes también fue encontrado el cuerpo de María José S. C., de 49 años, en la casa de su expareja con heridas de arma blanca y signos de asfixia. Cuando entraron los bomberos, su expareja estaba allí. La policía detuvo a este hombre de 50 años que carece de antecedentes penales. No existían denuncias por violencia de género. El supuesto agresor le había dicho a la víctima que si no volvía con él se suicidaría, y por eso ella acudió a su domicilio.

Cataluña. El martes, los Mossos d'Esquadra detuvieron a un hombre de 58 años acusado de matar a su pareja, de 57. El lunes esta fue hallada sin vida en su domicilio, en el municipio de Gelida (Alt Penedès). La víctima presentaba signos de violencia. El juez dictó secreto de las actuaciones y no consta si existían denuncias previas. En 2014 han muerto cinco mujeres a manos de sus parejas en Cataluña, más que en todo 2013 en esta comunidad.

País Vasco. Andina Pereira de Brito, brasileña de 35 años, fue hallada muerta y con signos de violencia el pasado lunes en Mungia. Uno de sus hijos, menor de edad, encontró a su madre inconsciente en su casa y llamó a los servicios de emergencias, que trataron de reanimarla sin éxito. La mujer fue presuntamente estrangulada por su expareja Joseba Andoni A. P., un ciudadano español de la misma edad. Está separado de otra mujer y tiene varios antecedentes policiales por malos tratos en esa relación anterior. El juez ha decretado su ingreso en prisión este miércoles.

La víctima no había presentado denuncia, aunque fuentes de su entorno informaron a Efe que él "no la dejaba tranquila" y que el crimen "se veía venir". Pereira de Brito tenía dos hijos, de 10 y siete años. Acababa de romper su relación con el agresor. La Ertzaintza ha abierto una investigación. Es el primer asesinato machista de este año en el País Vasco. 

PENDIENTE DE ENTAR EN LA CARCEL Y EN TRATAMIENTO PSIQUIATRICO LE DAN LA CUSTODIA COMPARTIDA DE UNA NIÑA DE 6 AÑOS

MUY GRAVE

Un joven con trabajo y una hija pide no entrar a la cárcel por delitos cometidos hace 10 años

Con 19 años se dio a la fuga de dos guardias civiles de paisano, otros dos resultaron heridos persiguiéndole y hallaron hachís en su coche

16.03.2014 | 12:17
Esteban Amorós, con la hoja de firmas, se cubre el rostro para proteger su intimidad.
Esteban Amorós, con la hoja de firmas, se cubre el rostro para proteger su intimidad.

Esteban Amorós Salgado cuenta que cometió un «error de juventud» cuando apenas tenía diecinueve años y se encuentra ahora, una década después, con que tiene que entrar en prisión. Está recogiendo firmas a toda prisa para intentar pedir un indulto parcial porque asegura que tiene su vida hecha, que está plenamente reinsertado en la sociedad y que ir a la cárcel destrozaría su vía, en lugar de tener el efecto correctivo que busca la ley. Con su trabajo en un puesto de mercadillo que traslada por distintos municipios todos los días de la semana, con una hija de seis años de la que le acaban de conceder la custodia compartida, y en tratamiento psiquiátrico desde que quedó en libertad provisional tres meses después de ser detenido, Esteban sabe que todo se evaporará si tiene que cumplir la pena que le impuso a principios de 2013 un juzgado de lo Penal y que ratificó posteriormente la Audiencia Provincial.

Tanto él como su familia se sienten impotentes, y encuentran injusto que diez años después le corresponda entrar en prisión. Esteban y sus padres sostienen que no piden el indulto total, sino que le rebajen la pena para que pueda cumplir con trabajos en beneficio de la comunidad aunque tenga que dormir en prisión, pero que no priven de libertad porque eso le hundiría.

Según lo cuenta él, una tarde de abril de 2004 venía con un amigo de Crevillent hacia Santa Pola cuando a la altura de Carrefour, conduciendo el coche de su madre se le cruzó un vehículo y bajaron dos hombres que le apuntaron con pistolas. Él se asustó, asegura, porque desconocía que eran agentes de la Guardia Civil, y se dio a la fuga. En la persecución, otros dos guardias resultaron heridos al chocar con otro coche, aunque él sostiene que no colisionó con ellos y que invadieron el carril contrario. Abandonó posteriormente el coche aparcándolo en la calle y se marchó. La sentencia condenatoria dice, sin embargo, que era objeto de seguimiento por la Guardia Civil de Santa Pola porque se dedicaba a la venta de droga y que reconoció a los guardias (que no exhibieron armas) y se dio conscientemente a la fuga, golpeando al coche que le interceptaba el paso y provocando un accidente, dejando en el vehículo 400 gramos de hachís bajo un asiento. Fue condenado por un delito contra la salud pública (un año y diez meses), un delito de atentado contra agentes de la autoridad con instrumento peligroso (tres años y dos meses), dos delitos de lesiones (nueve y siete meses) y un delito de conducción temeraria (siete meses), con el atenuante de dilaciones indebidas.

En cualquier caso, pese a que mantiene que no es culpable de varios de los delitos por los que se le ha condenado (y detalla los testigos que llevó al juicio que soportarían su versión, a los que lamenta que no se escuchó), ante todo sostiene con amargura que «después de diez años esto es hundirme... estuve tres meses en la cárcel y sé lo que es, los abogados me han dicho que intente recoger firmas para que me permitan cumplir la pena en cosas sociales o entrando a dormir, pero quiero seguir trabajando y viendo a mi hija».

Su madre sostiene que «sabemos que tiene que pagar, pero no queremos que vaya a la cárcel porque está reinsertado, tiene una hija, un trabajo como autónomo y clientes, y no ha vuelto a tener ningún problema, pedimos el indulto porque es una pena, porque después de diez años no le va a ayudar en nada ir a prisión, porque si lo meten lo va a perder todo». Los abogados les han dicho que tienen que darse prisa y recoger entre ocho y diez mil firmas antes del martes, de modo que los familiares de Esteban se han volcado saliendo a la calle con carpetas y acudiendo al Ayuntamiento o a la Parroquia de Santa Pola o a Cáritas para pedir apoyo: «Es que son muchas firmas, no llegamos...», se lamenta él

«No veo que esto sea justicia: Cometió un error, hemos pedido perdón y sí, los errores se pagan, pero ¿a la cárcel diez años después? Solo pedimos que pueda pagar de otra manera, porque metiéndole allí solo le van a hundir», dicen sus padres.

STOP FEMINICIDIO

Foto

martes, 18 de marzo de 2014

¿Cuándo deja un menor de sufrir violencia de género?

Cada vez es más evidente la necesidad de otro modelo de masculinidad. Un modelo basado en los afectos, las emociones… en la sostenibilidad de la vida y, no sólo, en cubrir las necesidades básicas y “ser el cabeza de familia”. Desde esta visión, creo que el modelo tradicional de paternidad hace mucho daño, tanto a los y las menores como a sus propios padres y madres.

Es un modelo cruel que no debe perdurar, pero es el predominante. Cada vez que me hablan de custodias compartidas me rechinan los dientes. ¿Compartidas? Si una persona no se ha ocupado de su hija o hijo desde su nacimiento ¿por qué quiere, en el divorcio, la custodia compartida? Aquí, realmente no hay género, me da igual si es madre o padre. Si no te has ocupado de tu hija o hijo, no entiendo por qué quieres su custodia. Si tu forma de educar se ha centrado en cubrir sus necesidades materiales dejando de lado el resto de componentes que implica la educación de un niño o niña, ¿el divorcio va a ser el punto que haga que ahora sí te impliques en la educación de tu hijo o hija?

Si miro las estadísticas, me dicen que las madres cumplimos nuestro rol de maternidad tal y como dictó el siglo XIX (este modelo también me da  miedo) y, que son los padres los más tendentes a ocupar el rol de “sustentadores” del hogar. Es evidente que, desde la infancia, las personas necesitamos no sólo alimentos, una casa… sino de aceptación, reconocimiento, afecto, unos valores… De ahí, mi reclamo de otro tipo de paternidad y maternidad.
 
A mí, la custodia compartida me da pánico. Son muchas las razones. Imaginaos: yo no me llevo bien con mi expareja y puedo utilizar a mi hija o hijo para el control  y la coacción de mi ex. Esto se vive día sí y día también en los casos de violencia de género cuando en un juzgado se dicta la custodia compartida.
 


Menores utilizados/as como parte de la violencia de género por parte de los maltratadoresPongámonos en el caso en el que el padre tiene una sentencia en firme como maltratador. Es decir, el padre maltrata física y/o psicológicamente a la madre. Afortunadamente, no maltrata al o la menor de forma directa; aunque no es difícil imaginar que ese o esa menor vive los efectos de esa violencia: puede verlo, vive sus consecuencias, vive un estrés emocional continuo, etc. Si en ese caso hubiera custodia compartida, ¿os resulta difícil imaginar a ese o esa menor siendo utilizado/a para seguir ejerciendo violencia contra su madre? Y, entonces, ¿cuándo deja de sufrir violencia en sus carnes?
 
 
 

STOP A LAS PRUEBAS PERICIALES MANIPULADA​S

Volvemos una y otra vez a la incompetencia, a la subjetividad, a la parcialidad, a la falta de profesionalidad y a la apología de un a determinada ideología. Por supuesto y como ya viene a ser frecuente hoy día, el bienestar del menor olvidado y secundario.
Todos y todas sabemos que para que una custodia compartida proteja el interés del menor, deben darse una serie de circunstancias: entendimiento y comunicación fluida entre los progenitores y por supuesto, que ninguno de ellos sufra trastornos psicológicos que pudieran entorpecer, al menos, la buena voluntad que se presupone para que la medida afecte a la integridad psicosocial de los hijos e hijas lo menos posible.
 
Pues bien, ciertos “profesionales”, están omitiendo los test como herramienta objetiva a la hora de medir la cordura o no de los padres. Esto conlleva que están basando sus informes únicamente en entrevistas breves, insuficientes, dirigidas, condicionadas y sobretodo, subjetivas, quedando por tanto sujeto el dictamen exclusivamente a su parecer subjetivo.
Más grave es además que, además de basarse únicamente en su opinión, tiñen los informes de una ideología absolutamente descarada que tratan de imponer a costa de no valorar debidamente situaciones, perfiles, pruebas y voluntades de adultos y menores.
En otros casos, como puede ser el del Gabinete Psicosocial del Juzgado de Familia nº 24 de Madrid, se limitan a hacer un único test para cubrir el expediente, el test CUIDA, que a juicio de la mayor parte de profesionales, o al menos de aquellos con ética y un mínimo de objetividad y del sentido del trabajo bien hecho, es claramente insuficiente para valorar la presencia o ausencia de trastornos psicológicos que pueden incluso revestir el carácter de graves. Hablando claro: puede que alguno de los progenitores esté "tarado", es decir, que tenga algún trastorno psicológico de carácter grave y que aun así supere dicho test con cierta facilidad.
 
Ya está bien de tanta ineptitud y de tanta falta de profesionalidad. Exigimos que se hagan test en profundidad, tantos como sean necesarios para analizar a fondo la salud psicológica de los progenitores y que se complementen con entrevistas objetivas y encaminadas cada uno a analizar a fondo todos y cada uno de los casos.

Fdo. Asociación Custodia en Positivo